Sumidos en nuestra rutina, olvidamos la belleza de fachadas y edificios como una estación de tren o un teatro. Cuando se exploran las ciudades, es difícil no prestar atención a la arquitectura de las iglesias, de los edificios antiguos y de las bibliotecas, pero es bastante raro tener la oportunidad de fotografiarlos vacíos de toda presencia humana.

Franck Bohbot es un francés de renombre que ha viajado por todo el mundo en busca constante de nuevos rincones urbanos. Con su obra nos ofrece una nueva visión de lo que nos rodea y en lo que ya no siempre nos fijamos.

La fotografía “urbex” (urbana exploration) consiste en fotografiar lugares que fueron construidos por el hombre pero que ahora están olvidados, abandonados y a menudo deteriorados por el tiempo. Son muchas las preguntas que se plantean al ver estas fotografías.

¿Qué ha pasado? ¿Cuánto tiempo hace que el hombre abandonó este lugar? ¿De quién era este lugar? Tantas preguntas que quedarán sin respuesta. Nuestra imaginación se convierte en nuestra mejor amiga para descubrir todas las facetas de estos lugares ricos en historia. Entre los exploradores de lugares abandonados, Aurelien Villette destaca a la cabeza del grupo con sus coloridas fotografías de arquitectura . Se interesa por la descripción y la estética de lugares abandonados. El juego de luces, los materiales envejecidos, las perspectivas y las estructuras arquitectónicas se destacan y magnifican.