Herodes Becen nació en Francia hace unos treinta años. Originario de Rennes y apasionado de Bretaña, se instaló en Saint-Pabu, en el corazón de las montañas negras del Finisterre. Formado en estudios literarios, enseñó durante algunos años en la Universidad de Bretaña Occidental antes de profesionalizarse como fotógrafo. Su trabajo fotográfico se construye en torno a sus viajes, ya sea hacia el interior o caminando a lo largo de los océanos. Viaja por los bosques y costas más salvajes en busca de lugares propicios para la meditación que considera Lugares Energéticos. Herodes Becen contempla el horizonte desde su taller situado en un brazo de mar y prepara sus futuras series anticipándose a cada una de sus creaciones. Yogui consumado, acerca su práctica espiritual a su visión de la fotografía, que quiere estar libre de todo superfluo estético, creyendo que cuanto más bello es algo, más simple debe ser.